Supersticiones XXVII

Pensando en las supersticiones y las lluvias de otoño se me viene a la cabeza una curiosidad.

Llegando esta época, casi todo el mundo saca un paraguas en los días de lluvia para protegerse del agua, aunque también hay quien lo lleva los días de sol para protegerse de éste cuando hace calor.

Recuerdo cuando era pequeña como mi madre me reprendía cada vez que abría mi paraguas dentro de casa mientras jugaba con mis hermanas. Siempre me decía que daba mala suerte, con lo cual lo cerraba inmediatamente sin entender el porqué de todo esto. Ahora, con unos años más, sigo sin entenderlo.

Durante unos meses trabajé en admisión de una sala de bingo y cuando llovía siempre me fijaba si los clientes abrían el paraguas dentro o cuando ya estaban en la calle y siempre lo hacían ya una vez fuera de la sala.

Un día mantuve, con una clienta, una conversación sobre este tema y me decía que abrir un paraguas bajo un techo daba mala suerte y si lo ponías sobre una mesa podía traer discusiones entre los presentes y ¡esto último si que no lo había oído nunca!

Por lo visto es muy común esta superstición y me he informado un poco sobre ella.

Cuentan que el paraguas existe desde hace unos 3.000 años y que hasta encontrar un resorte con el que se pudiera abrir con suavidad había algunos accidentes domésticos por la brusquedad de éstos al abrirse. De esta manera se le fue atribuyendo a la “mala suerte” estos accidentes domésticos y de ahí la superstición.

No sé si alguien tiene otro tipo de información, si es así me gustaría saberla.