Refranes y consejos de mi abuela

Ayer por la tarde estuve un ratito con mi abuela, que de vez en cuando paso a visitarla y a hacerle un poco de compañía.

Mientras merendábamos estuvimos hablando de su “GRAN PASADO”, y lo pongo con mayúsculas porque según lo que me cuenta su pasado es mayúsculo e interesantísimo. Bueno, como decía estuvimos hablando de alguno de los recuerdos que celosamente guarda y que tanto trabajo le cuesta contar, casi siempre por el dolor que en ella y su familia causaron, pero este no era el caso. Ayer hablamos de “Sus Amores”.

Aunque me costó trabajo de centrarla en la conversación al final lo conseguí, pero no logré que hablara claro y me sorprendió la forma tan sutil que tuvo de darme consejos, porque casi todo fue a base de refranes y dichos, sin darme detalles de su experiencia amorosa.

Me dijo:
“Amor con amor se paga” porque si das Amor eso será lo que recibirás.

“Amor forastero, amor pasajero” y continuó diciendo “Amores nuevos olvidan los viejos” aquí si me contó que ella lo sabía por experiencia ya que tuvo un novio quinceañero que no era del pueblo y que cuando se fue conoció al que sería mi abuelo y él hizo que se olvidara del anterior.

Continuó diciéndome que un “Amor grande, vence mil dificultades” y que si yo tenía la gran suerte de encontrar ese amor que lo cuidara y lo mimara todos los días, porque sólo así lo conservaría toda la vida.

Y concluyó diciéndome que “A mucho amor, mucho perdón” y que eso no lo olvidara nunca.

Cuando ya se cansó de hablar de este tema me dijo que aunque había conocido a algunos hombres (y me aclaró que sólo fue uno) antes que a mi abuelo, ella estaba segura que nunca encontraría a otra persona igual que él, y es por eso que cuando se quedó viuda con 38 años no dejó que nadie entrara en su vida, para no sufrir ni hacer sufrir. Ella tenía la total seguridad de que nunca encontraría a otro hombre como su “Amado García” (mi abuelo se llamaba García de nombre)

Son estos los inteligentes consejos que siempre guardo celosamente en mi interior y nunca olvido, porque vienen de una persona que siempre ha querido lo mejor para mí y además alimentados con la gran experiencia de la vida. Porque como ella también me dice en algunas ocasiones “Más sabe el demonio por viejo, que por diablo”

Ya sean en forma de refrán, de dicho o como me lo quiera decir, qué importante son para mi los consejos de mi abuela.