Amanece una nueva semana

Hoy es de esos días que te levantas y no tienes ganas de escribir. No es porque me suceda nada, simplemente es que no tengo ganas, y de pronto me he acordado de unas lindas fotografías que hice desde una ventana de mi casa.

Hace 5 días, cuando me levanté me llamó muchísimo la atención la Luna. Estaba llena y la tenía justo enfrente de mí. Noté como me miraba y parecía como si me estuviera hablando, como si quisiera que le dijera lo linda que la veía, cogí mi cámara y la fotografíe un par de veces. Hoy, he decidido compartirla con vosotros.
He cogido la cámara, he pasado las fotos al ordenador y me he sorprendido de los resultados.

No es que yo sea una buena fotógrafa, ni nada por el estilo, pero es que con poco tiempo de diferencia entre ellas he notado una diferencia muy curiosa.

Esta es la primera que hice y tengo que deciros que no se refleja lo que yo ví en ese momento, pero me siguen pareciendo preciosas.


Esta es la siguiente, y me ha sorprendido esa segunda luna que se ve a la izquierda o será… ¿el reflejo de ella misma? ¿una mota de polvo?
Repito que no soy ninguna experta en el maravilloso arte de la fotografía, pero tengo que insistir en que me he sorprendido cuando las he visto.
¿Alguien me puede aclarar qué es lo que ha sucedido en la segunda fotografía?

¡Que tengáis una feliz semana!