Cuando era pequeña escuchaba a mi madre decir: “cuando empiecen las rebajas iremos de compras porque la ropa se te está quedando pequeña”. Yo no sabía que era eso de “las rebajas” hasta que fui creciendo y empezó a interesarme mi vestuario.
Recuerdo perfectamente la primera vez que fui de rebajas consciente de lo que estaba haciendo. Era Agosto y cuando empecé a probarme la ropa que me gustaba no había mi talla o si la había no era del color que yo quería. Lo cierto es que me volví sin haber comprado nada y muy decepcionada.
Luego con el tiempo me di cuenta que si realmente quieres comprarte algo de tu talla, con el color que te gusta y barato, tienes que hacerlo los primeros días. Más adelante si es cierto que encuentras las cosas más baratas, pero están más escogidas y vienen los problemas con las tallas, colores…
Hoy empiezan y pienso que es el mejor momento para ir de compras, pero sin llegar a al punto de querer ser la primera y por su puesto tampoco me pelearía por una prenda, como he visto en alguna ocasión.
Normalmente no voy el primer día por eso de la bulla, pero ya aprendí que no debo dejarlo para muy tarde.
Con esto de la crisis, tengo que mirar por el dinero, pero no quiero privarme de eso que tanto me gusta: “ir a comprar trapitos”. Así que me aguanto un poco y espero las rebajas, y como empiezan hoy… pues eso, me toca ir de compras.
Ya te contaré.
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